En esta nota te vas a encontrar con: movilidad compartida, impacto ambiental, on demand
Contaminación atmosférica, ruido, aumento de la siniestralidad, pérdida del espacio público son tan solo algunos de los problemas que genera el uso excesivo del automóvil en muchas ciudades. ¡Y sí! Lo repetimos otra vez, la movilidad es un tema crucial y se necesita orientarla a un enfoque más sustentable.
En este contetxo, en el séptimo episodio de esta cuarta temporada de podcast, charlamos sobre carsharing, una nueva tendencia que, además de mejorar las condiciones de las personas en el acceso a la movilidad, se presenta como una oportunidad para colaborar con el medioambiente.
El futuro del carsharing
A medida que la necesidad de moverse en forma sustentable crece, el carsharing se perfila como una parte clave de la movilidad del futuro. Empresas y gobiernos, en diversas partes del mundo, están apostando a la creación de este servicio. Según la consultora Geotab, Latinoamérica es ya el segundo mercado del mundo del carsharing, e informes como Latin America Carsharing Market Research Report: Forecast 2021-2026 marcan un crecimiento gigantesco en el próximo lustro, de más de un 26%. Mientras que en Europa, ya son 15,4 millones los usuarios de carsharing, según el estudio Automotive Car Sharing in Europe de Deloitte.
Por otra parte, un estudio realizado sobre Movilidad e impactos ambientales del uso compartido de automóviles en los Países Bajos indica que “los usuarios de carsharing adquieren, de media, un 30% menos de automóviles y el impacto en su huella de carbono es muy notable, con una reducción de entre el 15% y el 20%”.
¿Y por Argentina cómo andamos?
Como explica, Juan Cruz Simone – Director de operaciones de operaciones de una de las empresas que presta este servicio en Buenos Aires- en el séptimo episodio de Circulantes, “el carsharing es un concepto de una modalidad de alquiler que viene de Europa, pero acá en Argentina es alquiler de vehículos por minutos, horas o días, donde se paga únicamente por el tiempo de uso”.
¿Cómo funciona? El proceso es muy simple y consiste en desterrar un concepto de lo que son las rentadoras tradicionales, dónde hay que firmar mucho papeleo -dice Simone y agrega- son cinco simples pasos: te descargás la aplicación, ponés tus datos personales, licencia de conducir, selfie con documento en mano, tarjeta de crédito y la generación de un pin, que es el que valida y confirma la reserva del vehículo”.
Por su parte, Rodrigo Perez Terra -Co-fundador de My Keego- comenta que su público objetivo es la gente que vive en la ciudad de Buenos Aires, aquel que para mantener un auto propio, debe pagar costos de cochera, de mantenimiento, de patente, de seguro y todos los gastos asociados. Y además, dice Perez Terra -“el lucro cesante de tener la inversión en un vehículo cuando realmente su utilización es una vez o dos veces por semana”.
Rodrigo, además, lanza una pregunta que va derecho a cuestionarnos nuestras costumbres y hábitos como circulantes: “¿realmente necesitás tener un auto o podés usarlo solamente cuando lo necesitás?”
Claro que cada persona tiene necesidades diferentes de movilidad, pero el carsharing se presenta como una alternativa que puede alivianarnos el bolsillo y contribuir con el medioambiente. Te compartimos cinco buenos motivos para que te subas a bordo y le digas adios al auto propio:
- Ahorro de Dinero
Como mencionamos antes, uno de los beneficios más evidentes es el ahorro económico. Al optar por el carsharing, te liberás de los costos asociados a la propiedad de un automóvil, como el seguro, el mantenimiento, el combustible y los impuestos. En lugar de hacer un desembolso considerable por un auto, solo pagás por el tiempo y la distancia que realmente utilizás. ¡Puedes tener un vehículo cuando lo necesitas sin romper el chanchito!
- Reducción de la congestión= menor contaminación.
El carsharing contribuye a descongestionar nuestras ciudades. Reducimos la cantidad de vehículos en las calles, lo que se traduce en menor tráfico y más espacio para todos. Esto también disminuye la huella de carbono al reducir los embotellamientos.
Sobre movilidad y huella de carbono conversamos en el sexto episodio de esta cuarta temporada: Carbono neutralidad.
3 Flexibilidad
El carsharing brinda flexibilidad al poder elegir el tipo de vehículo que necesitás para cada ocasión. ¿Un coche compacto para el día a día o una furgoneta espaciosa para mudanzas o salidas en grupo? La elección es tuya.
- Acceso Instantáneo
Con el carsharing, el acceso a un vehículo es instantáneo. Podés reservar un auto con solo unos toques en tu teléfono y empezar a moverte en minutos.
Sobre la utilización de Apps, orientadas a disminuir nuestra huella de carbono en la ciudad conversamos en nuestro episodio 11 de la tercera temporada.
- Menos estrés
El carsharing elimina el estrés asociado con la propiedad de un vehículo. Adiós a las preocupaciones por el mantenimiento, el seguro o los problemas mecánicos. Con el carsharing, te dedicas a disfrutar del viaje, sin preocupaciones adicionales.
Así que… ¿por qué no darle una oportunidad al Carsharing? Si todavía te quedan dudas, escuchá la experiencia de quienes ya lo utilizaron, entre ellas la periodista María O’Donnell, en el episodio de podcast: Carsharing: movilidad on demand